Partimos de la oscuridad
el paisaje se ha asentado.
Nada puede verse con claridad
lo nítido se vuelve frágil
inconstante, traslúcido
espectral.
La opacidad como paisaje aquieta
una ciudad que arde
en sus reflejos los espejismos
los detalles son a partir de destellos
fugacidad del mundo en un movimiento.
Movimientos entre la opacidad y las formas conocidas.
As de luz que vacila
corta la noche
como una estrella que danza
En la oscuridad el movimiento
es un grado de luz
y de soslayo se ven las llamas,
la ciudad abrumada
Retrovisiones en un paisaje oscuro
Existen cosmos enteros en un detalle,
destellos de verdades nuevas.
Lo nítido y lo quieto se pierden
en nuevas superficies de una luz
que no se queda quieta
y ya no engaña.
Con los párpados entreabiertos
las cosas dejan ver
su evanescencia y su capricho.
Movimientos en el paisaje
de una oscuridad
que se ha asentado.
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